Marruecos-EE.UU : La cuestión del Sáhara en el centro de las conversaciones de David Hale en Rabat

El subsecretario de Estado para Asuntos Políticos de los Estados Unidos, David Hale, a quién se esperaba inicialmente para una visita de trabajo a Marruecos el 10 y 11 de abril, llegó a Rabat el lunes, dónde tuvo una reunión inicial con el ministro marroquí de Asuntos exteriores, Nasser Burita.
Esta entrevista se centró en la asociación estratégica entre el reino de Marruecos y los Estados Unidos, así como en temas de interés común, particularmente regionales, según fuentes cercanas al Ministerio de Asuntos Exteriores.
De hecho, Estados Unidos está convencido del papel desempeñado por Marruecos en la región en términos de paz y seguridad.
Los dos responsables, agregan las mismas fuentes, también discutieron de los últimos desarrollos del tema del Sáhara, que es objeto, en este mes de abril, de intensas discusiones en las Naciones Unidas en Nueva York y Ginebra.
Cabe señalar que David Hale también deberia ir a Francia y Bélgica para consultas sobre este tema, después de su visita a Marruecos.
En Nueva York, el Consejo de Seguridad debe considerar el martes y el miércoles, el nuevo informe sobre el Sáhara que le ha sometido el 2 de abril, el Secretario General de la ONU, Antonio Guterres.
También será informado por el enviado personal del Secretario General de las Naciones Unidas para el Sáhara, Horst Köhler, sobre los resultados de las dos mesas redondas celebradas respectivamente el 5 y 6 de diciembre de 2018 y el 21 y 22 de marzo de 2019 en Ginebra, con el Participación de Marruecos, Argelia, El Polisario y Mauritania.
El jefe de MINURSO y el Representante Especial de la ONU, Colin Stewart, informarán al Consejo de Seguridad sobre las actividades de su misión en ambos lados del dispositivo de defensa marroquí.
El 29 de abril, se espera que los 15 miembros del Consejo de Seguridad voten sobre el nuevo proyecto de resolución sobre el Sáhara y la extensión por otros seis meses del mandato de la MINURSO.
Este mandato se había reducido a seis meses en lugar de un año, a solicitud de los Estados Unidos para instar a las partes involucradas en este conflicto a que activen su acuerdo político final.