¿Cómo podria salvar Christopher Ross el Polisario de las garras de Argelia ?

El mediador de la ONU para el Sahara a retomarà a principios de marzo, el bastón de peregrino para tratar de involucrar a los marroquíes y los dirigentes del Polisario en las negociaciones directas.
En el Sáhara Occidental, los habitàntes, están convencidas de que la nueva ronda del Enviado Especial de la ONU, Christopher Ross aportará nada nuevo. El enfoque del mediador de la ONU, en su opinión, no puede tener éxito siempre que el gobierno argelino no decida lo contrario.
Ante la obstinacion del régimen argelino para perpetuar el status quo, dice un experto de la agencia de la ONU con sede en Rabat, los marroquíés y el Polisario están lejos de estar listos para sentarse alrededor de la misma mesa de negociaciones directas sin condiciones previas.
Si Marruecos ha flexibilizado gradualmente su posición a través de su plan de autonomía para la zona en disputa, agrega la misma fuente, los dirigentes del Polisario al parecer prisioneros del paternalismo argelino, se han quedado paralizados en su posición inicial llamando a la organización de un referéndum de autodeterminación.
El Jefe del Polisario, Mohamed Abdelaziz y sus lugartenientes, dice un ex diplomático español que estuvo destinado en Argel, nunca fueron capaces de liberarse de la fuerte supervisión general del ejército argelino que actúa en la sombra.
El Polisario, añade, representa una moneda de cambio de suma importancia para los estrategas del régimen argelino cara a Marruecos que les disputa el liderazgo regional en el Magreb y en el África Occidental.
En este contexto, dice el diplomático contactado por teléfono, Ross tiene todas las dificultades del mundo a enfrentar los dos protagonistas del conflicto.
En su análisis, el ex diplomático se unió a su compatriota, el periodista y escritor español Chema Gil que asegura que el Polisario es una «creación artificial pura de Argelia.»
En su nuevo libro «Polisario : la historia de un frente contra los derechos humanos y la seguridad internacional», Chema Gil que conoce los antecedentes históricos de este caso, sostiene que los gobernantes de Argel habían instalado en el momento de la Guerra Fría, los separatistas del Polisario y su quimérica república saharaui en su suelo, con la esperanza de presionar a Marruecos para tener acceso a la costa del Atlántico. Como los argelinos no viéron nada venir, cerraron su frontera con el Reino y continuaron usando el Polisario y las poblaciones en los campamentos de Tinduf, como medio de presión permanente sobre el vecino Marruecos.