Reunión de ministros árabes de Exteriores sobre Palestina: SM el Rey llamó repetidamente a hacer prevalecer la lógica de la paz y la cooperación – Bourita –

El ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación africana y Marroquíes Residentes en el Extranjero, Nasser Bourita, subrayó el miércoles en El Cairo ante la sesión extraordinaria del Consejo de la Liga Árabe a nivel de ministros de Asuntos Exteriores sobre la evolución de la situación en Palestina, que Su Majestad el rey Mohammed VI, que Dios le asista, llamó repetidamente a abandonar la lógica del conflicto y la violencia en favor de la de la paz, la cooperación y la construcción de un espacio próspero para todos los pueblos de la región.

Presidiendo la reunión, dedicada a examinar las acciones que deben emprenderse a nivel árabe para poner fin a la escalada en los territorios palestinos y poner fin a los ataques contra civiles, Bourita expresó la disposición de Marruecos a adherirse a cualquier esfuerzo árabe e internacional encaminado a lograr las aspiraciones del pueblo palestino de establecer un Estado independiente con Al-Quds Oriental como capital en las fronteras del 4 de junio de 1967, de conformidad con la solución de dos Estados acordada internacionalmente.

SM el Rey ha subrayado siempre en que la seguridad y la estabilidad de Oriente Medio requieren buenos oficios y esfuerzos intensos y continuos para pasar de la lógica del conflicto y la violencia a la de la paz, la cooperación y la construcción de un espacio próspero para todos los pueblos de la región, insistió.

También reiteró el apoyo total y constante del Reino de Marruecos al Estado de Palestina y a su autoridad nacional legítima bajo el liderazgo del presidente Mahmoud Abbas Abu Mazen en la defensa de los derechos del pueblo palestino y la realización de sus aspiraciones a la libertad, la independencia y una vida digna.

Bourita subrayó el compromiso del Reino de Marruecos, bajo el liderazgo de SM el Rey Mohammed VI, en favor de una paz justa y global conforme a las resoluciones de la legalidad internacional como opción estratégica ineludible.

«Los acontecimientos sangrientos y horribles que estallaron el sábado 7 de octubre de 2023 y la violencia sin precedentes que los acompañó muestran que la región se enfrenta a una situación sin precedentes que podría empujar el conflicto hacia una fase de repercusiones imprevisibles y alimentar un discurso de exterminio sistemático atroz», añadió.

Asimismo, señaló que Su Majestad el Rey había advertido constantemente contra el peligro de bloquear la perspectiva política de la causa palestina y de continuar con las violaciones y las medidas unilaterales en Al-Quds y en los territorios palestinos ocupados.

El Soberano, subrayó el ministro, también advirtió que estas acciones inaceptables alimentan el extremismo, nutren la cultura de la violencia, avivan las llamas del conflicto, socavan los esfuerzos de apaciguamiento y torpedean la perspectiva de la solución de los dos Estados, así como las posibilidades de una paz global, justa y duradera.

Bourita indicó que, siguiendo las altas instrucciones de Su Majestad el Rey Mohammed VI, que Dios le asista, el Reino de Marruecos, en su calidad de Presidente de la 160ª sesión del Consejo de la Liga Árabe a nivel ministerial, convocó una reunión de urgencia para consultar y coordinarse sobre el deterioro de la situación en la Franja de Gaza y el desencadenamiento de actos militares dirigidos contra civiles, además de examinar los medios para poner fin a esta peligrosa escalada.

En esta ocasión, el ministro presentó cuatro ejes de acción como hoja de ruta para hacer frente al deterioro de la situación en la Franja de Gaza y los territorios palestinos ocupados, subrayando la necesidad de no escatimar esfuerzos para lograr el apaciguamiento y poner fin al derramamiento de sangre mediante acciones colectivas o individuales con las fuerzas internacionales activas, con el objetivo de poner fin inmediatamente a los enfrentamientos y reducir la escalada, trabajando al tiempo para proteger a los civiles, evitar que sean blanco de ataques y poner fin a las provocaciones y acciones unilaterales, con el objetivo de impedir que la situación se descontrole.

En el mismo contexto, subrayó la importancia de evaluar las necesidades sanitarias y humanitarias urgentes en la Franja de Gaza y el resto de los territorios palestinos afectados, y de planificar una reunión de emergencia del Consejo de Ministros de Sanidad Árabes para atender estas necesidades.

Bourita instó asimismo a las partes internacionales que patrocinan el proceso de paz, incluido el Cuarteto Internacional, a que inicien verdaderas consultas encaminadas a relanzar el proceso de paz con el fin de elaborar una hoja de ruta con objetivos prácticos, incluido un calendario para iniciar negociaciones serias entre palestinos e israelíes con vistas a acordar la fórmula definitiva para una solución de la cuestión palestina, de conformidad con los parámetros internacionales y árabes.

El ministro subrayó asimismo la importancia de reforzar la capacidad negociadora de los hermanos palestinos acelerando el proceso de reconciliación nacional, poniendo fin a la discordia y haciendo prevalecer el interés supremo palestino, instando a la República Árabe de Egipto a proseguir sus esfuerzos sostenidos para lograr una reconciliación palestina efectiva y duradera.

El Consejo de la Liga de Estados Árabes, a nivel de ministros de Asuntos Exteriores, había adoptado una resolución en la que exige el cese inmediato de la guerra israelí contra la Franja de Gaza y sus alrededores, pidiendo a todas las partes a actuar con moderación.

La resolución advirtió de «las catastróficas repercusiones humanitarias y de seguridad de la continuación y extensión de la escalada», y pidió una acción urgente y eficaz para hacer cumplir el derecho internacional y garantizar la seguridad y estabilidad de la región frente al riesgo de una nueva escalada de la violencia, que tendrá un coste para todos.

En el mismo contexto, los ministros árabes de Asuntos Exteriores condenaron la matanza de civiles en ambos bandos y expresaron su categórico rechazo a cualquier acción dirigida contra ellos, al tiempo que subrayaron la imperiosa necesidad de garantizar su protección, de acuerdo con los valores humanos universales y en cumplimiento del derecho internacional humanitario y las leyes de la guerra.