Marruecos, fortalecido por las claras orientaciones de SM el Rey, prestará un apoyo constante a la estabilidad y la integridad territorial de Sudán – Bourita –
El Reino de Marruecos, apoyándose en las orientaciones claras de SM el Rey Mohammed VI, apoyará, como siempre lo ha hecho, constantemente la estabilidad y la integridad territorial de Sudán, declaró el lunes en Rabat el ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación africana y Marroquíes Residentes en el Extranjero, Nasser Bourita.
Marruecos mostrará también su total solidaridad con este país hermano y su pueblo en las opciones que tomen, afirmó Bourita, que participó, por videoconferencia, en la 1137ª sesión de la reunión ministerial del Consejo de Paz y Seguridad (CPS) de la Unión Africana (UA), sobre el examen de la situación en Sudán.
También reafirmó la solidaridad del Reino con Sudán hermano y reiteró su apoyo inquebrantable a su seguridad y estabilidad, así como a su unidad nacional e integridad territorial.
Calificando esta reunión como una «demostración de apoyo a Sudán», el ministro afirmó que «no estamos aquí para juzgar, sino para ayudar. Quizá sea una obviedad, pero es importante recordarlo».
Se trata de una fase nueva portadora de esperanza, que se inició con la firma del «Acuerdo Marco Político» de 5 de diciembre de 2022, y el compromiso de las partes, desde el 8 de enero, de entablar conversaciones con vistas a una transición ordenada, prosiguió, añadiendo que se ha relanzado el proceso político con, esta vez, perspectivas reales de estabilización de las instituciones democráticas.
Saludando estos importantes avances, Bourita rindió homenaje a todas las partes interesadas sudanesas (dirigentes en ejercicio, partidos políticos, sindicatos y asociaciones) por haberlo hecho posible.
El ministro también elogió los esfuerzos de la ONU, la UA y la IGAD (Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo), cuyo papel es esencial para facilitar un proceso político creíble e integrador, precisando que la continuación de este compromiso trilateral es crucial para preservar el acuerdo del 5 de diciembre y ayudar a Sudán a superar sus retos políticos y económicos.
«Es ahora, cuando el objetivo está al alcance de la mano, cuando las partes interesadas se enfrentan, más que nunca, a su responsabilidad histórica: la de ponerse del lado del diálogo y del interés supremo de la Nación», añadió, señalando que «para ser un paso cualitativo, el Acuerdo del 5 de diciembre no es ni un fin en sí mismo, ni el final del camino».
En este sentido, Bourita llamó a todas las partes a superar las divisiones y estar dispuestas a alcanzar los compromisos políticos necesarios, señalando que, para ser sostenibles, los acuerdos deben ser inclusivos en su contenido y en sus protagonistas.
«El desmantelamiento del reducto del pasado debe reflejarse en la consolidación de instituciones democráticas fuertes e independientes que puedan garantizar la transparencia y la rendición de cuentas», sostuvo, considerando que las reformas económicas son «la otra pata» del proceso político.
Los esfuerzos de Sudán por acelerar la adopción de un Plan Nacional de Recuperación Económica deben ir acompañados del apoyo activo de la comunidad internacional, insistió Bourita.
«La crisis de Sudán dura ya demasiado tiempo. Aunque queda mucho por hacer, la dirección tomada por Sudán es prometedora», se congratuló, concluyendo que existe una esperanza real de que este país hermano recupere su estabilidad a largo plazo y recupere sin más demora su lugar en la familia institucional panafricana.