Fiel a su tradición de potencia de paz, Marruecos aboga por la pacificación y la unidad libia – Politólogo –
Fiel a su tradición de potencia de paz, Marruecos aboga por la pacificación y la unidad libia para salir de la crisis, afirma el politólogo Mustapha Tossa.
En un análisis publicado, hoy viernes en el sitio Atlasinfo, el experto en geopolítica volvió sobre la conferencia de Berlín 2 sobre la crisis libia bajo el título «¡No hay solución berlinesa a la crisis libia!»
Mustapha Tossa afirma que los últimos acontecimientos de la crisis libia han brindado la oportunidad de «hacer emerger la distinción entre dos enfoques totalmente contradictorios de los países del Magreb».
Mientras Argelia percibe a Libia como un teatro de intervención militar, después de que su presidente Abdelmadjid Tebboune amenazara con intervenir militarmente en Trípoli, Marruecos, «fiel a su tradición de potencia de paz, eligió la reconciliación y el consenso libio para salir de la crisis», subraya el politólogo.
Mientras que «Argelia aparece como un país de la desestabilización y de la división», Marruecos, por su parte, «aboga por la pacificación y la unidad libia, que deben ser obra exclusiva de los actores y de los ciudadanos libios», destaca el autor del análisis.
Aunque Marruecos se había impuesto en el plano regional como la única potencia dinámica en el proceso de reconciliación libio a través de las múltiples reuniones del proceso de Buznika, y que debería haber estado en primera fila pero también uno de los principales animadores de la reconciliación libia, fue paradójicamente excluido de la primera conferencia de Berlín sobre Libia, recuerda Mustapha Tossa.
Sin embrago, incluso estando ausente físicamente de esta conferencia sobre Libia, Marruecos quiso precisar el marco de su intervención reconciliadora en el teatro libio. Su convicción es que no hay una receta exterior preparada para resolver la crisis libia y que la única solución viable debe venir de los propios libios, subraya el politólogo.
Tras este encuentro internacional, prosigue Tossa, Marruecos quiso precisar su visión a través de esta declaración impactante de su ministro de Asuntos Exteriores, Nasser Bourita: «No hay solución berlinesa a un problema de África del Norte. El Norte de África tiene su propio contexto y dinámica. Marruecos conoce estas dinámicas y por eso su contribución es, ante todo, la de acompañar a los libios en la búsqueda de soluciones.»
En efecto, señala el comentarista, la Conferencia de Berlín 2 no obtuvo resultados concretos. Más allá de las proclamaciones de intención sobre la necesidad de sacar a los mercenarios y a los ejércitos extranjeros de Libia para facilitar la unificación de las instituciones libias y la organización de las elecciones previstas por las Naciones Unidas el 24 de diciembre próximo, no hay mecanismos vinculantes para los actores internacionales de esta crisis, sostuvo.