GDEM Izik: Activistas pro-Polisario probablemente arriesgan de seis a doce meses de cárcel por alterar el orden público

Los efectos perversos de los sangrientos acontecimientos del campamento de GDEM Izik cerca de El Aaiún, siguen siendo de actualidad en España. Seis activistas pro-Polisario han sido citados a comparecer mañana, viernes, ante los tribunales españoles por alterar el orden público dentro del recinto parlamentario.Los activistas españoles conocidos por su ciego apoyo al movimiento de independencia que exige la autodeterminación en el Sáhara Occidental, son procesados por el cargo de «perturbación y amenaza grave para el orden público». Según la legislación española, arriesgan por éste delito, una pena de prisión de seis a doce meses, junto enventualmente a una multa. La audiencia se llevará a cabo en el juzgado de la Plaza de Castilla en Madrid.
A principios de diciembre, los acusados fueron detenidos por la policía por orden del Presidente del Congreso español de los Diputados (cámara baja del parlamento), por haber sembrado la confusión en el recinto.

la detención se llevó a cabo mientras que el Congreso de los Diputados español celebraba una sesión plenaria consagrada a la discusión y aprobación de un proyecto de ley relacionado con los sangrientos acontecimientos que acompañaron el desmantelamiento del campamento GDEM Izik en las afueras de la ciudad El Aaiún, la capital del Sáhara Occidental. Durante ésta reunión, los activistas pro-Polisario que siguieron el debate desde la tribuna de invitados de la Cámara, comenzaron a interrumpir el trabajo de los Diputados para evitar el éxito de la reunión gritàndo consignas contra Marruecos y pro-Polisario, en un vano intento de influir en la votación de éste texto.
Ante el escándalo, el presidente del Congreso de los Diputados, José Bono se vio obligado a interrumpir la sesión y hacer evacuar a los invitados de la tribuna. Luego ordenó a la policía de detener a los activistas pro-Polisario que fueron expulsados del recinto parlamentario.
Después de su detención y sus identificación en el puesto de policía en la cámara, fueron trasladados a bordo de un furgón policial a una comisaría de policía de la capital, donde fueron escuchados y una acta se estableció para sus comparecencia ante el tribunal. Los activistas pro-Polisario, especialmente españoles, que son problemáticos y agua-fiestas dispuestos a venderse a precios bajos, no se pierden ninguna oportunidad para sembrar la discordia. Un buen número de artículos publicados por los periódicos Ibéricos sobre cuestiones del sáhara marroquí, revelan que éstos activistas están a cargo de los servicios de inteligencia argelinos que sufragan a menudo sus viajes y alojamiento.