Londres, descarta cualquier mejora entre Marruecos y Argelia, en ausencia de una solución al conflicto del Sáhara Occidental

Las relaciones entre Rabat y Argel siguen siendo prisioneras de la situación actual en el que se encuentra enbarrancado el conflicto del Sáhara Occidental. Y como viene de afirmar un alto cargo de la diplomacia británica en ausencia de una solución a la cuestión del Sahara, «hay pocas posibilidades de una mejora significativa de las relaciones entre Marruecos y Argelia» . En su intervención en un debate celebrado la noche del jueves en la sede de la filial del Parlamento británico sobre la cuestión del Sahara, Alistair Burt, Ministro en el Foreing Office para el Medio Oriente y África del Norte, dijo que la cuestión del Sàhara continúa impidiendo una cooperación significativa en todo el Magreb en materia de lucha contra la amenaza planteada por los grupos extremistas. Al mismo tiempo, el Maghreb, insistió, es un mercado emergente y de creciente importancia estratégica para el Reino Unido. En cuanto a las preocupaciones planteadas por el Gobierno de Marruecos acerca de la creciente participación de al-Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) en actividades delictivas en toda la región, el diplomático británico ha asegurado que el gobierno de su país compartiria éstas mismas preocupaciones.

Según el Ministro de Relaciones Exteriores para el Oriente Medio y Norte de África, el reciente descubrimiento de un gran alijo de armas en la ciudad de Amgala, cuyos autores se encuentran en asociación con Al Qaeda, sólo ha reforzado las preocupaciones de ambos países. Alistair Burt, también dio la bienvenida a la «atmósfera de cordialidad y respeto», que marcó la última ronda de conversaciones oficiosas celebradas en Manhasset (cerca de Nueva York) bajo los auspicios del Enviado Personal Secretario General d la ONU para el Sáhara, Christopher Ross y al que asistieron delegaciones de Marruecos, Argelia, Mauritania y el Frente Polisario. Durante su última visita a Marruecos en diciembre pasado, el ministro del Foreing Office, encargado de Medio Oriente y África del Norte, dijo sobre el conflicto del Sáhara, que en Gran Bretaña, «insistimos en la necesidad de alcanzar una solución negociada. » Ninguna parte del exterior puede dictar la solución «, dijo a la prensa local, insistiendo en una solución» negociada y aceptada por ambas partes. «