El «polisario» una amenaza inminente a las puertas de Europa (Geopolitólogo)

París – El «polisario» es un peligro «inminente» a las puertas de Europa y los países europeos se interesan especialmente por la amenaza que representa esta «entidad» sobre todo con «las conexiones que puede haber en la franja sahelo-sahariana», afirma Emmanuel Dupuy, presidente del Instituto de Prospectiva y Seguridad en Europa (IPSE), un Think tank especializado en cuestiones de geopolítica y geoestrategia, con sede en París.
«La presencia del Jefe del Estado Islámico en el Gran Sáhara Abu Walid al-Saharaui, que prestó lealtad a Daesh en la creación de esta organización terrorista en mayo de 2015, es uno de los elementos por los que la comunidad internacional, especialmente los países implicados en la operación Barkhane, están movilizados», confió Dupuy en una entrevista a la MAP, en vísperas de una conferencia virtual sobre el tema «La amenaza del polisario para la región euromediterránea: una responsabilidad innegable de Argelia», organizada conjuntamente por el IPSE y el Instituto Mandela. Aunque la cuestión del terrorismo en el Sahel «no interesa necesariamente a todos los países europeos (…), existe en estos países una vigilancia y una conciencia de la interconexión a través de personas militantes del terrorismo que transitan a lo largo de la franja sahelo-sahariana y accesoriamente que migran al espacio sahariano», analiza este experto en geopolítica. Esto es especialmente cierto en «los países que están más implicados en las cuestiones del terrorismo, es decir, los que han tenido que vivir atentados terroristas, en este caso Gran Bretaña a partir de los atentados de Londres en 2005, España en 2004 y, evidentemente, diez años más tarde, los atentados que han golpeado Francia. Otros países también se han visto afectados por el terrorismo, como Suecia, Bélgica y Alemania». Según el presidente del IPSE, «hay muchas personas comprometidas en la lucha contra el terrorismo pero no todo el mundo está comprometido al mismo nivel», destacando los diferentes niveles de participación entre países europeos en la lucha militar contra los grupos armados terroristas en la zona. El mismo advirtió, en este contexto, que los grupos terroristas quieren ampliar su escenario de operaciones. «Tenemos la certeza de que hubo varios intentos de penetración en Senegal en febrero de 2020, y unos días antes de la cumbre de Yamena, tuvimos la certeza de que los grupos terroristas están alimentando el plan para desarrollar su activismo militar y su capacidad de causar daño en todo el espacio de la CEDEAO y apuntando especialmente a los países del Golfo de Guinea», alertó. Por lo tanto, la estabilización de la zona sahelo-sahariana y la lucha contra los grupos terroristas que proliferan en ella requieren «una convergencia de opiniones», y «una verdadera implicación de las organizaciones creadas para promover la cohesión entre los Estados, en particular la CENSAD y la CEDEAO», declaró, lamentando que algunos países no pertenezcan a todas estas organizaciones, como es el caso de Argelia, que no es miembro de la CENSAD. «Todo esto es un poderoso factor legitimador para incluir a países que, como Marruecos, tienen una preocupación por la estabilidad y la seguridad de su Sur, en este caso el Sáhara, por lo que la cooperación antiterrorista entre Francia, España y Marruecos es especialmente bienvenida», concluyó.