Sáhara : los últimos disparos en blanco del Polisario

El jefe del Frente Polisario, Brahim Ghali y sus lugartenientes, que ya no tienen argumentos sólidos para defender su tesis separatista, han aumentado recientemente los disparos en blanco no solo contra Marruecos, sino también contra la ONU, su Secretario General y el Consejo de Seguridad.

El desorden del Polisario, actuando bajo las órdenes del régimen argelino de color verde caqui, se amplificó con la angustiosa pandemia de coronavirus que silenció temporalmente las voces de los pocos países que aún respaldan sus quiméricas y obsoletas demandas.

De repente, los peones del Polisario se encontraron solos sobre el tablero de ajedrez político-diplomático internacional, mientras que penas llegan a controlar la situación explosiva en los campamentos de Tinduf, donde los movimientos de protesta se multiplican contra la precariedad de las condiciones de vida empeoradas por la caída de la ayuda humanitaria internacional.

Para calmar los espíritus sobrecalentados de los habitantes de los campamentos, los dirigentes y ejecutivos del Polisario tratan torpemente de responsabilizar a Marruecos, a Francia, que lo apoya, y a la ONU, que ha enterrado definitivamente la opción de un «Referéndum de autodeterminación» apoyado por el Polisario y su padrino argelino.

El Polisario, cuyo campo de maniobra se ha reducido claramente a nivel internacional, ahora está atacando a la ONU y al Consejo de Seguridad, que se inclinan hacia la posición marroquí y son lentos para nombrar un nuevo mediador en el conflicto del Sahara. Sin embargo, los juristas explican este retraso por la posición congelada del Polisario que sigue obedeciendo ciegamente las instrucciones del poder argelino.

Además, la justicia española no suelta rienda contra ciertos dirigentes del Polisario acusados ??de graves delitos.

A petición de la fiscalía, el magistrado José de la Mata Amaya, de la Audiencia Nacional de España, decidió extender por un año adicional las investigaciones iniciadas a raíz de la denuncia presentada en enero de 2008 por la Asociación Saharaui de defensa de los derechos humanos contra 24 altos responsables del Polisario y cuatro oficiales de los servicios de inteligencia argelinos, acusados ??de tortura, violación y otros delitos punibles con fuertes penas.

Con esta decisión, la querella no se archiva y pesará como una espada de Damocles sobre la cabeza de los acusados ??al menos hasta el 5 de agosto de 2021.