Amnistía Internacional exige la liberación de Mustafa Salma
El rapto de Mustafa Salma Ueld Sidi Mulud por las milicias armadas del Polisario y su conduccion a un destino desconocido sigue suscitàndo una profunda preocupación entre numerosas organizaciones no gubernamentales de derechos humanos. Según Human Rights Watch que ha llamado a la liberación inmediata del responsable saharaui, es entorno de Amnistía Internacional (AI), con sede en Londres, de expresar su gran preocupación por la suerte de Mustafa Salma y pidió al Polisario de aclarar su situación jurídica y el lugar de su detención.
Tràs llamar la atencion de la dirección del Polisario contra posibles represalias o detención arbitraria de la cuàl seria objeto Mustafa Salma, Amnistía Internacional teme que la interpelación de éste último no tenga como único motivo el apoyo que ha mostrado para con la posición de Marruecos en el conflicto del Sáhara Occidental.
En éste caso, Amnistía contempla considerar Ueld Sidi Mulud como preso de conciencia. La Organización Internacional para la Defensa de los Derechos Humanos también afirma que ha sido informada por Mohamed Sheikh Sidi Mulud, hermano de Mustafa Salma, que los miembros de la familia han sido informados verbalmente que éste ultimo sera presentado ante un tribunal militar en el plazo de 12 días por venir.
Considerando además que Mustafa Salma se ha simplemente expresado libre y pacíficamente, Amnistía Internacional pide simplemente su puesta en libertad. Reafirma su derecho de acceso, con efecto inmediato, a un abogado, su familia y toda la atención médica que necesita.
Las ONGS internacionales también recuerdàn sobre las desventuras de dos periodistas marroquíes del semanario «Al Assahara Usbuiya» Lahcen Tigbadar y Mohamed Slimani Tigbadar, que fueron maltratados e impedido por los servicios de seguridad e inteligencia de Argelia para garantizar la cobertura del retorno de Mustafa Salma Ueld Sidi Mulud a los campamentos de Tinduf.
Segun Amnistía,los dos periodistas marroquíes fueron sometidos a su llegada al aeropuerto de la ciudad de Tinduf, a un interrogatorio antes de ser asignado a arresto domiciliario hasta su expulsión de Argelia el 22 de septiembre. Los dirigentes de Argelia y el Polisario han puesto las patas en un atolladero del cual es difícil salir indemne.