La deriva saharaui del ministro argelino Attaf solo en el Consejo de Seguridad

El ministro argelino de Asuntos Exteriores, Ahmed Attaf, se distinguió miserablemente durante un debate del Consejo de Seguridad de la ONU sobre la participación de las mujeres en la paz y la seguridad internacionales, al repetir las mentiras de su país sobre la cuestión del Sáhara marroquí.

En respuesta a estas afirmaciones engañosas del ministro argelino durante el debate celebrado el miércoles en Nueva York, el representante permanente adjunto de Marruecos ante la ONU, Omar Kadiri, señaló que el MAE argelino fue el único que mencionó el Sáhara marroquí entre el centenar de Estados miembros y varios altos funcionarios de la ONU y representantes de la sociedad civil que tomaron la palabra. El ministro argelino «demostró una vez más, si es que aún se necesitaban pruebas, que Argelia es la parte principal del diferendo regional sobre el Sáhara marroquí, que creó y que mantiene», precisó el diplomático, añadiendo que el responsable argelino «tuvo a bien mencionar la cuestión del Sáhara marroquí en términos equívocos, demostrando todo el odio que este país siente por su vecino Marruecos». En la misma línea, Kadiri afirmó que, a diferencia de la mujer argelina, la mujer marroquí del Sáhara marroquí goza de plenos derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales, y proclaman su marroquinidad a diario, participando en las elecciones, siendo elegidas, gestionando los asuntos locales del Sáhara marroquí, y participando, en pie de igualdad con los hombres, en la emancipación política y el desarrollo socioeconómico y cultural de las provincias del sur del Reino. «Desgraciadamente, éste no es el caso de la mujer argelina, que sufre las peores violaciones de todos sus derechos, a las que se prohíbe manifestarse y protestar contra estas violaciones, y que se ven reducidas al silencio, cuando no a la salida forzosa o incluso al exilio», añadió el diplomático, deplorando la suerte de las mujeres del «valeroso hirak, que han sido detenidas arbitrariamente, y que han sufrido, y siguen sufriendo, las peores violaciones por la única razón de que exigen un presente y un futuro mejores para ellas y sus hijos». También denunció la situación de «las valientes mujeres cabilas, encarceladas por el mero hecho de hacer valer su derecho inalienable a la autodeterminación, reprimidas e impedidas de llevar su traje tradicional, que representa desde hace siglos su cultura y su identidad cabila específica». Refiriéndose al firme compromiso de Marruecos de hacer avanzar la aplicación de la agenda «Mujeres, Paz y Seguridad» (MPS) de la ONU, Kadiri recordó el Plan de Acción Nacional, que forma parte del compromiso de Su Majestad el Rey Mohammed VI de promover la igualdad de género como fundamento de una sociedad justa, democrática e igualitaria. «Marruecos considera su Plan de Acción Nacional-MPS no como un ejercicio de formalismo, sino como una manifestación concreta del compromiso de Marruecos con la igualdad de género, así como de su convicción de que la agenda +Mujer, Paz y Seguridad+ es un componente esencial en el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales», explicó.