Sáhara: Tres millones de marroquíés marchan contra el sesgo de Ban Ki-Moon
Más de tres millones de marroquíés acudieron el domingo a la capital del reino, Rabat, para participar en una marcha popular sin precedentes organizada trás los derrapes verbales del Secretario General de la ONU, Ban Ki-Moon, sobre el Sahara marroquí.
Iniciada al llamamiento de los partidos políticos, sindicatos y asociaciones y organizaciones de la sociedad civil, esta marcha ha movilizado a los ciudadanos de todas las edades y sexos, llegados a Rabat para denunciar los derrapes verbales del SG de la ONU, Ban Ki-Moon, sobre el Sahara marroquí, durante su reciente gira por los campamentos de Tinduf y Argel.
Fue una verdadera marea humana espontánea que rápidamente se amplificó con la llegada antes de la hora programada (10:00 am), de miles de ciudadanos de todo el país para participar en la manifestación popular habiendo surcado las principales calles del centro de la capital.
La muchedumbre despertó lemas patrióticos y a la gloria del Sahara marroquí y denunciarón las declaraciones sesgadas del Secretario General de las Naciones Unidas sobre el Sahara marroquí.
Uno de los líderes políticos que participaron en la marcha nos dijo que el jefe de la ONU es «en última instancia, una víctima de las maquinaciones del régimen argelino», cuyas arcas se vaciaron y ahora busca desviar la atención de los argelinos de sus problemas políticos y sociales reales para enfocarlos en torno al conflicto del Sahara.
Con la caída del precio del petróleo y el agotamiento de las reservas de divisas en moneda extranjera en el país, dijo el líder Marroqui, el régimen argelino ya no es capaz de satisfacer las demandas de los ciudadanos argelinos, recurriendo a las arcas del Estado que fueron cómodamente alimentadas por la riqueza petrolera.
Para evitar la escalada y el aumento de las tensiones sociales en su propio país, concluyó, los líderes de Argelia y los poderosos militares de alto rango ponen toda la presión sobre el asunto del «Sahara Occidental» para desviar la atención de la opinión pública argelina incluso con el riesgo de desencadenar un nuevo conflicto regional con consecuencias impredecibles.