El asunto del Sahara : Realismo onuvense, logro de Marruecos, tergiversacion de los separatistas.
Cuàl no fueron las condiciones en las que las instancias onuvenses han tomado ciertas decisiones en el asunto del Sahara, es lamentable que los que quieren mantener el conflicto en un callejón sin salida, han dado siempre un sentido abusivo a sus decisiones. La ONU, habia ciertamente votado resoluciones pidiendo que la población del Sahara sea consultada sobre su futuro y, sobre su suerte politica, pero la Organización internacional no ha precisado claramente nunca de qué población se trata, aquella censada en condiciones màs que contestables por el ejercito de ocupación, o aquella que se fugo de la represion, del territorio hacia el norte y, hacia el sur. La ONU, no ha determinado jamàs en qué espacio geogràfico, ni tampoco en qué sentido la consulta deberia ser conducida. Dicho en plata, las resoluciones de la ONU, sobre el conflicto del Sahara han siempre sido teñidas de una ambigüedad que dà lugar a interpretaciones tendenciosas.Los adversarios de Marruecos, en busqueda de referentes, solo podian aferrarse a las tésis, de la colonización que ha fabricado pueblos y fronteras.
El problema del Sahara no puede pués, ser disociado de la cuestion colonial y, de especificidad en el caso de Marruecos.
Los adversarios de Marruecos, en este asunto, aprovechando en la época el apoyo de ciertas corrientes dominantes, no disponian de ningun argumento juridico o, politico convincente, se han contentado de llevar el hàbito colonial.
Es debido a estàs razones, que el conflicto ha tomado proporciones peligrosas, asistimos, no obstante a una densa precipitación de los acontecimientos cuya envergadura haria que el Sahara se erigiera en una prioridad de las politicas exteriores de los estados de la region y, en una cuestion espinosa para las instancias internacionales.
La ONU, después de varios exàmenes, se ha dado cuenta de la realidad politica del problema, y es por està razon por la cuàl se oriento hacia la busqueda de otras vias de mediación susceptible de dar con la solucion definitiva del conflicto, que perdura desde hace màs de tres décadas. Pero hacia falta, como se dice en términos juridicos, un juez informador, honesto, imparcial y, capaz de explorar todos los datos reales del asunto.
Es a està tarea a la que se dedico, el representante personal del secretario general de la ONU, Peter Van Walsum. Habrà que recordar, que nuevos datos han favorecido , animado y, facilitado la tarea del diplomàtico onuvense.
Desde el 6 de noviembre de 1.999, fecha que coincide con el Duodécimo cuarto aniversario de la marcha verde, signos de buena voluntad de Marruecos de integrar con calma el Sahara, en el respeto de la legalidad internacional , han aparecido. En un importante discurso a ésta ocasión, el Rey Mohamed VI, se ha públicamente comprometido en un acercamiento novedoso de la cuestion del Sahara. Sin presagiar del futuro, la ONU, vé de buen ojo, la toma en mano por el Monarca del dossier del Sahara, lo mismo que la voluntad de la monarquia de asociar la población del territorio dentro de un amplio movimiento federativo Marroquí.
Los diferentes organos onuvenses han juzgado la iniciativa Marroquí de acordar un estatuto de autonomia al territorio del Sahara, como el mejor medio de descongelar el conflicto, siendo aun, conforme a la resolucion 1541, adoptado al dia siguiente de la resolucion 1514.
Una autonomia alargada, es en principio, concebida para responder a las necesidades de una situación dada, es también el resultado de negociaciones entre el estado y, las poblaciones concernientes.
El ultimo informe del S.G de la ONU, prueba que ha adoptado las conclusiones finales de su enviado especial el Señor Van Walsum. Lo que retiene la atención en ese informe, lo que releva, sin titubeos, es que la gran responsabilidad en el bloqueo de la situación, corresponde a los adversarios de Marruecos, que persisten en sus tergiversaciones y, sus esperas ilusorias de ver el plan separatista triunfar, sin embargo, es el realismo onuvense el que ha triunfado, el consejo de seguridad en su resolucion 1.813, ha decidido reforzar los logros Marroquíes, consagrando la preeminencia de la proposicion de autonomia en el marco del respeto de la soberania Marroquí, y la unidad nacional del Reino.
Prometedora sobre el plano nacional, està salida feliz al contencioso Saharaui, tendria certeramente efectos benéficos sobre el conjunto de la region, sobre todo a lo que se refierea la estabilidad, la seguridad, la modernizacion politica y, el desarrollo economico y social.
Pondrà ciertamente final al calvario de los inocentes Saharauis secuestrados en unas condiciones inhumanas en los campamentos de la vergüenza de Tinduf en Argelia. Permitira al mismo tiempo relanzar sobre nuevas bases, el proyecto de unificación, de combatir el peligro terrorista que amenaza toda la region y, de revalorizar la dimesion mediterranea del Maghreb.
La esperanza para salir de este atolladero, queda tributario de la comprensión y, de la predisposición de la otra parte de admitir la realidad y, de abandonar la estéril polémica para comprometerse juntos en la via saludable de la concordia y el progreso.
Los adversarios de Marruecos, en este asunto, aprovechando en la época el apoyo de ciertas corrientes dominantes, no disponian de ningun argumento juridico o, politico convincente, se han contentado de llevar el hàbito colonial.
Es debido a estàs razones, que el conflicto ha tomado proporciones peligrosas, asistimos, no obstante a una densa precipitación de los acontecimientos cuya envergadura haria que el Sahara se erigiera en una prioridad de las politicas exteriores de los estados de la region y, en una cuestion espinosa para las instancias internacionales.
La ONU, después de varios exàmenes, se ha dado cuenta de la realidad politica del problema, y es por està razon por la cuàl se oriento hacia la busqueda de otras vias de mediación susceptible de dar con la solucion definitiva del conflicto, que perdura desde hace màs de tres décadas. Pero hacia falta, como se dice en términos juridicos, un juez informador, honesto, imparcial y, capaz de explorar todos los datos reales del asunto.
Es a està tarea a la que se dedico, el representante personal del secretario general de la ONU, Peter Van Walsum. Habrà que recordar, que nuevos datos han favorecido , animado y, facilitado la tarea del diplomàtico onuvense.
Desde el 6 de noviembre de 1.999, fecha que coincide con el Duodécimo cuarto aniversario de la marcha verde, signos de buena voluntad de Marruecos de integrar con calma el Sahara, en el respeto de la legalidad internacional , han aparecido. En un importante discurso a ésta ocasión, el Rey Mohamed VI, se ha públicamente comprometido en un acercamiento novedoso de la cuestion del Sahara. Sin presagiar del futuro, la ONU, vé de buen ojo, la toma en mano por el Monarca del dossier del Sahara, lo mismo que la voluntad de la monarquia de asociar la población del territorio dentro de un amplio movimiento federativo Marroquí.
Los diferentes organos onuvenses han juzgado la iniciativa Marroquí de acordar un estatuto de autonomia al territorio del Sahara, como el mejor medio de descongelar el conflicto, siendo aun, conforme a la resolucion 1541, adoptado al dia siguiente de la resolucion 1514.
Una autonomia alargada, es en principio, concebida para responder a las necesidades de una situación dada, es también el resultado de negociaciones entre el estado y, las poblaciones concernientes.
El ultimo informe del S.G de la ONU, prueba que ha adoptado las conclusiones finales de su enviado especial el Señor Van Walsum. Lo que retiene la atención en ese informe, lo que releva, sin titubeos, es que la gran responsabilidad en el bloqueo de la situación, corresponde a los adversarios de Marruecos, que persisten en sus tergiversaciones y, sus esperas ilusorias de ver el plan separatista triunfar, sin embargo, es el realismo onuvense el que ha triunfado, el consejo de seguridad en su resolucion 1.813, ha decidido reforzar los logros Marroquíes, consagrando la preeminencia de la proposicion de autonomia en el marco del respeto de la soberania Marroquí, y la unidad nacional del Reino.
Prometedora sobre el plano nacional, està salida feliz al contencioso Saharaui, tendria certeramente efectos benéficos sobre el conjunto de la region, sobre todo a lo que se refierea la estabilidad, la seguridad, la modernizacion politica y, el desarrollo economico y social.
Pondrà ciertamente final al calvario de los inocentes Saharauis secuestrados en unas condiciones inhumanas en los campamentos de la vergüenza de Tinduf en Argelia. Permitira al mismo tiempo relanzar sobre nuevas bases, el proyecto de unificación, de combatir el peligro terrorista que amenaza toda la region y, de revalorizar la dimesion mediterranea del Maghreb.
La esperanza para salir de este atolladero, queda tributario de la comprensión y, de la predisposición de la otra parte de admitir la realidad y, de abandonar la estéril polémica para comprometerse juntos en la via saludable de la concordia y el progreso.