El Secretario General de la ONU confirma la mano tendida de SM el Rey a Argelia

La mano tendida de Su Majestad el Rey Mohammed VI a Argelia ha sido muy bien acogida por el Secretario General de la ONU, António Guterres, en su último informe al Consejo de Seguridad sobre el Sáhara marroquí.

En efecto, Guterres citó en su informe el discurso de SM el Rey a la Nación, con motivo del 23º aniversario del acceso del Soberano al Trono de sus gloriosos antepasados, en el que SM el Rey tendió la mano, una vez más, a Argelia y al pueblo argelino. En este contexto, el Secretario General retomó pasajes del discurso real para recordar las garantías de Su Majestad el Rey a los argelinos de que «Marruecos y los marroquíes siempre estarán a su lado». Asimismo, según el informe, el Soberano subrayó que los marroquíes tienen un «firme compromiso» de encontrar una salida a la situación actual y de favorecer el acercamiento, la comunicación y el entendimiento entre los dos pueblos. A este respecto, Guterres destacó el deseo, una vez más, de SM el Rey Mohammed VI, que «aspira a trabajar con la presidencia argelina para que Marruecos y Argelia puedan trabajar de la mano para establecer relaciones normales». En sus observaciones y recomendaciones, el Secretario General de la ONU «alentó a los dos países a restablecer el diálogo con vistas a restaurar sus relaciones y a redoblar sus esfuerzos en el ámbito de la cooperación regional, en particular con vistas a crear un entorno propicio para la paz y la seguridad», reforzando así, de manera firme y clara, la mano tendida por el Soberano a Argelia. Además, el Secretario General recordó las visitas de su Enviado Personal que, según él, «tuvieron lugar en un contexto de tensiones regionales». A este respecto, dijo que Staffan de Mistura compartió con sus interlocutores en la región «la profunda preocupación que había observado entre los miembros de la comunidad internacional por el estado de las relaciones entre Argelia y Marruecos».  También recordó el llamamiento de su Enviado Personal «a la desescalada», concluyendo que De Mistura había «tomado nota con alivio de las garantías recibidas de sus interlocutores, especialmente en Argel y Rabat, de que no había ninguna intención de una escalada militar». Guterres reafirmó, en sus observaciones y recomendaciones al Consejo de Seguridad, «el papel crucial de los Estados vecinos en la búsqueda de una solución» a la cuestión del Sáhara marroquí, reiterando la expresión de su «preocupación ante el deterioro de las relaciones entre Marruecos y Argelia». Respaldando los llamamientos para el restablecimiento y la normalización de las relaciones entre Marruecos y Argelia, el Secretario General de la ONU señala directamente las acciones e iniciativas belicosas de Argelia contra su vecino, Marruecos, que van en contra de todas las normas de buena vecindad.