El partenariado renovado entre Marruecos y Francia centra una conferencia en París

Los retos del partenariado renovado entre Marruecos y Francia centraron una conferencia animada, este martes, por la embajadora de Su Majestad el Rey en Francia, Samira Sitail, en los prestigiosos salones del ayuntamiento de Neuilly-sur-Seine, cerca de París.

En este encuentro, celebrado bajo el lema “Marruecos-Francia: construir juntos un futuro común en un mundo en transición”, Sitail subrayó la determinación de los dos países de acelerar y reinventar su excepcional asociación, llevada al más alto nivel de Estado por Su Majestad el Rey Mohammed VI y el presidente francés Emmanuel Macron.

“De esta voluntad de muy alto nivel emana la creación de toda una serie de canales, que hoy en día consisten en identificar las vías y los temas sobre los que se basará a partir de ahora esta asociación excepcional y renovada entre los dos países”, subrayó Sitail ante personalidades de diversos ámbitos, entre ellos diplomáticos, periodistas, agentes económicos, cargos electos y miembros de la comunidad marroquí residente en Francia.

En particular, la diplomática se felicitó por la nueva postura de Francia sobre la cuestión nacional, que refuerza la dinámica internacional y el apoyo masivo a la soberanía del Reino sobre su Sáhara.

Para Sitail, la “reconstrucción” de la asociación franco-marroquí es esencial para el bien y el interés de ambos países “en un contexto geopolítico en plena mutación, donde las cartas se barajan de nuevo, en particular con la emergencia de nuevas potencias”.

Según la embajadora Sitail, esta “reconstrucción”, que también debe contemplarse desde una perspectiva continental, la del desarrollo del África “plural”, debe, especialmente, aprovechar la relación histórica entre ambos países, recordando los dos momentos clave que forjaron su excepcional asociación: “la fraternidad de las armas” con Francia, que este año celebra el 80º aniversario de los desembarcos y de la Liberación; y “la independencia de Marruecos” (1956), con la decisión de ambos países de mirar hacia el futuro.

En su opinión, este mismo enfoque de futuro debería regir las futuras relaciones bilaterales, con vistas a enriquecer y acelerar esta asociación en todos sus diferentes aspectos: cultural, económico, de seguridad, etc.