Gas: Varios diputados portugueses interpelan a su gobierno sobre el chantaje de Argelia a Europa

Varios diputados portugueses de diferentes tendencias políticas interpelaron, ayer lunes, a su gobierno sobre el chantaje energético que lleva a cabo Argelia contra Europa.

En una pregunta dirigida al ministro portugués de Medio Ambiente y Acción por el Clima, João Pedro Matos Fernandes, estos once diputados se preguntan sobre el impacto del cierre unilateral por parte de Argelia del gasoducto (GME) sobre el suministro de gas a varios países europeos, entre ellos Portugal.

Estos diputados recuerdan que el pasado 31 de octubre Argelia decidió unilateralmente no renovar el contrato del gasoducto Magreb-Europa que transita por Marruecos para llegar a España y abastece a los países de Europa, incluido Portugal, a riesgo de no cumplir sus compromisos de entrega a los socios europeos, en este mismo momento marcado por la subida de los precios del gas y, además, en vísperas de la llegada del invierno.

Consideran que la no renovación del contrato del GME podría afectar a los distintos países que reciben gas de Argelia, como Portugal, señalando que “independientemente de los contratos de suministro y de las capacidades de almacenamiento existentes, puede haber un impacto en la economía portuguesa”.

Los diputados portugueses destacan que, aunque esta cuestión tiene una dimensión de política europea, cada Estado, como es el caso de Portugal, debe proteger sus intereses nacionales, añadiendo que se trata de anticipar los problemas en lugar de reaccionar cuando es demasiado tarde y cuando se sentirán las presiones sobre los precios.

En este contexto, los diputados portugueses preguntan a su ministro qué medidas en materia de política energética se adoptarán para salvaguardar el interés nacional y evitar las dificultades de suministro o los aumentos de precios.

También se preguntan qué disposiciones se adoptarán para descarbonizar la economía del país y reducir la dependencia de los combustibles fósiles, por ejemplo, mediante el uso al hidrógeno.

El anuncio por parte de Argelia de su decisión de no renovar el acuerdo sobre el GME aviva las preocupaciones en Europa en el contexto del aumento de los precios del gas y de la proximidad del invierno. 

Esta decisión unilateral es considerada por muchos observadores y políticos europeos como un chantaje por parte de Argel hacia Europa.