Marcha Verde: El discurso real destacó los contornos de la doctrina diplomática marroquí sobre la integridad territorial del Reino – Bourita –
El discurso dirigido por SM el Rey Mohammed VI a la Nación con motivo del 46º aniversario de la Marcha Verde «fue en todos los aspectos un discurso fundador que expuso claramente los contornos de la doctrina diplomática marroquí sobre el tema de nuestra integridad territorial y la reforzó con una perspectiva política global», afirmó, el martes, el ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y Marroquíes Residentes en el Extranjero, Nasser Bourita.
Bourita, que respondía a una pregunta central sobre la evolución de la causa nacional durante la sesión semanal de preguntas orales en la Cámara de Consejeros, subrayó que el discurso real constituye también una hoja de ruta con contornos bien definidos para consagrar la marroquidad del Sáhara e inmunizar los logros alcanzados por Marruecos en los foros internacionales, También es un «indicador de una nueva fase de la movilización nacional global detrás de SM el Rey en el marco de una visión a largo plazo, concebida por el Soberano, para avanzar, con fuerza y firmeza, hacia el arreglo definitivo del conflicto regional artificial sobre al Sáhara marroquí».
En este contexto, el ministro destacó la acumulación sin precedentes de desarrollos «serenos y constructivos» que ha experimentado la causa nacional en los últimos tiempos, tal y como subrayó Su Majestad el Rey, añadiendo que la doctrina diplomática, tal y como la definió el Soberano sobre esta cuestión en su último discurso, tiene tres ejes, el primero se refiere al hecho de que el Sáhara marroquí es una realidad inmutable e irreversible, consagrada a nivel internacional gracias a las decisivas realizaciones de Marruecos en los últimos años, que han «dado a la acción diplomática una credibilidad reforzada por el consenso de todos los componentes de la Nación y la cohesión de todas sus fuerzas, movilizadas detrás de SM el Rey».
El segundo eje, prosiguió el ministro, consiste en que Marruecos, que no negocia sobre su Sáhara, se compromete de forma constructiva en el proceso de la ONU para alcanzar una solución política pacífica y definitiva a este diferendo regional artificial en el marco de la soberanía marroquí y la integridad territorial del Reino, mientras que el tercer eje se refiere al desarrollo global de las provincias del sur «en el que SM el Rey trabaja en el marco de su visión de desarrollar estas queridas provincias y convertirlas en una locomotora para la aplicación de una regionalización avanzada, con todo lo que ofrece en términos de perspectivas de desarrollo y de verdadera participación política».
En cuanto al eje inherente a la consagración de la marroquidad del Sáhara, el ministro explicó que se trata de una realidad inmutable, inalienable y no negociable, y añadió que SM el Rey «ha afirmado con firmeza y decisión que la marroquidad del Sáhara es una realidad inmutable e indiscutible, por la fuerza de la historia, la legitimidad, la voluntad de sus hijos y un amplio y creciente reconocimiento internacional».
Bourita estimó que esta clara confirmación real es un mensaje fuerte y claro para todos para eliminar cualquier ambigüedad y para derrotar cualquier mala interpretación de la posición nacional del Reino de Marruecos, afirmando que la gestión del expediente del Sáhara marroquí se lleva a cabo en el marco de la plena y no negociable soberanía de Marruecos sobre su Sáhara y la iniciativa de autonomía como la única solución para el arreglo de este conflicto artificial.
Bourita agregó que Marruecos se congratula de la continua consagración de la legitimidad representativa de los electos del Sáhara marroquí en el seno de la comunidad internacional y de las instancias de la ONU, señalando que la participación de los legítimos representantes electos de las provincias del sur ha sido cimentada por una invitación oficial de las Naciones Unidas por tercera vez consecutiva para participar en los trabajos de las comisiones y conferencias de la Asamblea General como representantes de esta parte integrante del territorio del Reino y de su pueblo.
En este sentido, el ministro afirmó que los representantes de las provincias del sur seguirán participando, como ya ocurrió anteriormente, en las mesas redondas establecidas por el Consejo de Seguridad como único mecanismo para alcanzar una esperada solución política.
En cuanto al segundo eje, relativo a la doctrina diplomática marroquí sobre la integridad territorial del Reino, Bourita precisó que Marruecos, si bien está convencido de que la marroquidad del Sáhara no es negociable, está «constructivamente comprometido en la búsqueda de una solución al conflicto regional artificial, originado por un Estado vecino opuesto a los derechos legítimos de Marruecos a completar su integridad territorial».
En este contexto, afirmó que el compromiso de Marruecos con el proceso político dirigido por la ONU se basa en su claro anuncio de que «la marroquidad del Sáhara nunca estará en la agenda de ninguna negociación», tal y como subrayó SM el Rey Mohammed VI en su discurso, señalando que estas negociaciones son esencialmente para alcanzar una solución pacífica de este conflicto regional artificial.
Basándose en esta lógica, Bourita señaló que Marruecos se compromete a prestar todo su apoyo al Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, y a su nuevo Enviado Personal, Staffan de Mistura, para poner fin a este diferendo artificial en el marco de la iniciativa de autonomía y «nada más».
Bourita recordó que el Consejo de Seguridad reforzó en su última decisión la posición de Marruecos reafirmando la preeminencia de la iniciativa marroquí de autonomía y rechazando todos los otros enfoques o tesis anticuadas que algunas partes todavía intentan reanimar.
Asimismo, Bourita prosiguió que el Consejo se congratuló de la dinámica emanada de las dos mesas redondas celebradas en Ginebra, confirmando explícitamente que la forma de las mesas redondas en presencia de las partes concernidas en este contencioso regional, es la única herramienta para avanzar en el proceso político, y ello a pesar de la férrea oposición de algunas partes a estas mesas redondas, expresada durante los debates del Consejo de Seguridad.
El ministro insistió en este contexto en el hecho de que el órgano ejecutivo de la ONU también ha subrayado la importancia de la participación efectiva de todas las partes realmente concernidas por este diferendo regional, mencionándolas por su nombre más de seis veces, «a pesar de las maniobras y presiones ejercidas por una de las partes sobre los miembros del Consejo de Seguridad en un intento de minimizar su papel y desautorizar su responsabilidad».
Por otra parte, Bourita subrayó los condicionantes y referencias del proceso de la ONU destinado a encontrar una solución política pragmática, realista, duradera y consensuada, «lo que significa que cualquier solución irreal e inviable no se considerará firmemente como una resolución de este diferendo artificial».
Bourita señaló que el Consejo de Seguridad llamó la atención sobre la renuncia ilegal de las milicias del «polisario» al alto el fuego, en vigor desde 1991, llamándoles a cesar los actos que ponen en peligro la seguridad y la estabilidad de la región.
El Consejo de Seguridad también insistió en la importancia de realizar un censo de la población de los campamentos de Tinduf, haciendo clara referencia a la responsabilidad del país anfitrión, sabiendo que ya ha alertado sobre la situación humanitaria y la violación de los derechos humanos de esta población, así como el desvío estructurado de la ayuda humanitaria destinada a los secuestrados.
Marruecos continuará trabajando de forma constructiva con el enviado especial «en el marco de las referencias del Consejo de Seguridad y en el marco de las determinantes y líneas rojas del Reino, tanto en lo que respecta a las partes concernidas en el conflicto, como para alcanzar una solución, o en lo que respecta a las determinantes de esta solución», afirmó el ministro.
Refiriéndose al tercer eje de esta doctrina diplomática, cuyos fundamentos son determinados por el Soberano en su discurso, Bourita señaló que este eje está relacionado con el desarrollo de las provincias del sur del Reino, añadiendo que también es una opción para resolver esta cuestión.
El discurso real destacó la evolución positiva de la cuestión del Sáhara, que también apoya la dinámica de desarrollo sostenida en las provincias del sur, indicó, señalando que en este sentido, Marruecos ha sido capaz, bajo la ilustrada dirección de Su Majestad el Rey, de poner en marcha una dinámica de desarrollo eficaz que ha permitido la movilización de importantes inversiones para desarrollar el capital humano, valorizar los productos de las regiones del sur y sus recursos naturales y proporcionar apoyo a las infraestructuras y la inversión en el tejido económico.
Bourita recordó que SM el Rey subrayó que Marruecos cuenta con socios internacionales de buena fe que, con toda claridad y transparencia, invierten junto al sector privado nacional y contribuyen así al bienestar de la población, señalando que el Soberano ha indicado claramente que con aquellos que muestran posiciones vagas o ambivalentes, Marruecos no se comprometerá con ninguna medida económica o comercial que excluya al Sáhara marroquí.
Al mismo tiempo, el ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y Marroquíes Residentes en el Extranjero afirmó que el Reino seguirá aplicando el proyecto de regionalización avanzada como una opción estratégica basada en la visión clarividente de SM el Rey y que enriquece la trayectoria de desarrollo de las provincias del sur, al igual que las otras regiones del Reino.
También subrayó que las políticas del gobierno continuarán su enfoque para reforzar las infraestructuras y los proyectos socioeconómicos en las provincias saharauis y mejorar su atractivo para las inversiones extranjeras directas, de modo que puedan convertirse en la puerta de entrada al continente africano y en una importante plataforma económica para el desarrollo de la región.
Así, la evolución de la causa nacional exige, más que nunca, la continuación del compromiso de todas las fuerzas vivas y su plena movilización detrás de SM el Rey, para defender la integridad territorial y hacer frente a las maniobras desesperadas de los enemigos del Reino, concluyó el ministro, congratulándose del papel crucial desempeñado por la diplomacia parlamentaria y los esfuerzos desplegados por los representantes de la nación para la defensa de la causa nacional, en el marco de la diplomacia parlamentaria y paralela.