«Ghali Gate»: España «debe hacer un mea culpa» sobre su incomprensible actitud – experto internacional –
España debe hacer un «mea culpa» sobre el asunto «Ghali Gate», afirmó el experto en relaciones internacionales en Ginebra, Matteo Dominici, calificando de «incomprensible» la decisión del gobierno ibérico de acoger a un individuo acusado de varios delitos por la justicia.
«Es realmente incomprensible, como europeo, ver que se ha concedido una hospitalización de urgencia en un hospital ibérico, a una persona acusada de delitos por la justicia de un país miembro de la Unión Europea, bajo una identidad y un pasaporte falsos, y unos días después, presenciar violaciones de Derechos Humanos por parte de las fuerzas de seguridad ibéricas, hacia otras personas» en Sebta, indicó Dominici en declaraciones a la MAP.
«Como en cualquier relación de confianza, humana, política o económica, hay ciertas reglas de respeto mutuo en las que no podemos transigir, y España debe hacer un mea culpa en el asunto del Ghali Gate», continuó.
Esta crisis entre el Reino de Marruecos y España, desencadenada a raíz de la hospitalización del denominado Brahim Ghali (Mohamed Ben Battouche, según su falsa identidad) en suelo español, «simboliza más que nunca una falta de visión geopolítica y multilateralista de algunos países europeos que pone en peligro a toda la Unión», añadió.
«Acoger a un individuo perseguido en España con un pasaporte falso y sin ni siquiera solicitar un visado no sólo es una infracción de las normas más esenciales de las políticas migratorias establecidas en el seno de la Unión Europea, sino sobre todo una gran falta de respeto a los miles de migrantes que han muerto en el Mediterráneo por no haber podido beneficiarse de las mismas ventajas», dijo Dominici.
Marruecos «es un socio sólido para el multilateralismo europeo e internacional», dijo, subrayando que este compromiso de Marruecos «se ha demostrado en muchas ocasiones a través de un enfoque diplomático estructurado y creíble, como por ejemplo en la crisis libia, en el conflicto palestino-israelí o en las complejidades de seguridad en el Sahel, donde el Reino desempeña un papel de liderazgo en la lucha contra el terrorismo y en los esfuerzos para hacer frente a los desafíos migratorios que pesan sobre la región».