Coronavirus: el Polisario impone un bloqueo total a las poblaciones de los campamentos de Tinduf
En un momento en que los países de todo el mundo han decretado el confinamiento parcial o general de las poblaciones para protegerlos del coronavirus, los dirigentes del Polisario han impuesto a las poblaciones saharauis un bloqueo total para evitar que abandonen los campamentos.
A través de este bloqueo, la dirección del frente separatista también busca evitar la filtración de cualquier información sobre la situación en los campamentos donde miles de civiles, hombres, mujeres y niños son completamente abandonados a su suerte ante la pandemia del covid-19 que ya ha dado, según una última evaluación, 1.468 casos confirmados de contaminación, incluidas 193 muertes en Argelia, país anfitrión de las poblaciones saharauis.
Los dirigentes del Polisario, la mayoría de los cuales han sido instalados cómodamente por las autoridades anfitrionas en villas en la ciudad argelina de Tinduf, prestan poca atención a los residentes de los campamentos, su comida, su asistencia médica y su protección contra los riesgos de contaminación.
Este abandono se ve agravado por la ausencia de estructuras sanitarias y condiciones higiénicas adecuadas, aparte de unas pocas casas rápidamente transformadas, en salas de aislamiento sin ningún protocolo sanitario.
Además, el ejército argelino ha bloqueado los puntos de acceso y salida de los campamentos de Tinduf por completo desde el establecimiento del estado de emergencia sanitaria en Argelia.
Según fuentes informadas con sede en Tinduf, el número de personas afectadas por el coronavirus en los campamentos equivaldría a 250 casos confirmados, incluidos al menos 17 milicianos armados del Polisario cerca de las fronteras con Mauritania, revelaron defensores y activistas de los derechos humanos basados ??en El Aaiún y Dakhla.
Según las mismas fuentes, hay varias muertes relacionadas con el Covid-19, pero que se mantienen en secreto por la administración del Polisario.
Los defensores de los derechos humanos que temen una tragedia humanitaria en estos campamentos en pleno desierto de Argelia y piden ayuda a la comunidad internacional y a la OMS para que intervengan.