La invitación de SM el Rey para participar en la investidura del presidente Diomaye Faye refleja el «carácter excepcional» de las relaciones marroquí-senegalesas – experto senegalés –
La invitación de Su Majestad el Rey Mohammed VI a participar en la ceremonia de juramento y toma de posesión del presidente electo Bassirou Diomaye Faye es «una prueba concreta del carácter excepcional» de las relaciones entre Senegal y Marruecos, indicó, el martes, el investigador senegalés Bakkary Sambe, director regional del think tank Timbuktu Institut, con sede en Dakar.
Aparte de los líderes de la subregión, Su Majestad el Rey Mohammed VI es el único Jefe de Estado que ha recibido una invitación para participar en la ceremonia de investidura del presidente electo de Senegal, en la que el Soberano está representado por el jefe de gobierno, Aziz Akhannouch.
Las relaciones marroquí-senegalesas «están arraigadas en una forma de perennidad que desafía al tiempo y a los políticos», subrayó el investigador senegalés en declaraciones a la MAP.
Autor del libro «El Marruecos Africano: Trayectorias de una ambición continental», Sambe señaló que la perennidad del eje Dakar-Rabat «se ha convertido en estructurante para los equilibrios regionales, la paz y la estabilidad, habida cuenta de la convergencia de puntos de vista y de la perfecta conciencia de lo que está en juego en una diplomacia siempre constructiva que nuestros dos países tienen en común».
A este respecto, recordó que las relaciones entre el Reino de Marruecos y la República de Senegal adquieren una nueva dimensión con las nuevas iniciativas lanzadas por Su Majestad el Rey Mohammed VI, en particular la Iniciativa Atlántica en el marco del gasoducto Marruecos-Nigeria, y en vísperas de la entrada de Senegal en la familia estratégica de los países productores de petróleo y gas.
Más allá de la fraternidad natural entre los dos países, Marruecos se está convirtiendo en un socio más que estratégico, sobre todo por las enormes oportunidades que ofrece como «Estado puente», subrayó el experto senegalés.
Destacó que las relaciones entre Marruecos y Senegal «siempre se han basado en la continuidad, con un carácter duradero debido a sus raíces históricas y, sobre todo, a su dimensión humana».