Marruecos-España, «un modelo de referencia» para la cooperación Norte-Sur – Moratinos –

Las relaciones entre Marruecos y España constituyen «un modelo de referencia» para la cooperación Norte-Sur, según el Alto Representante de Naciones Unidas para la Alianza de Civilizaciones, Miguel Angel Moratinos. 

Marruecos y España no sólo han dado una nueva dimensión a sus relaciones bilaterales, sino que ahora son «líderes y modelos de referencia» en la realización de proyectos e iniciativas de fuerte impacto regional, subrayó el ex jefe de la diplomacia española, en declaraciones a la MAP.  

Alabando la «visión ilustrada» de SM el Rey Mohammed VI para el desarrollo de África, Moratinos señaló que España y Marruecos son actores influyentes en la construcción de espacios de paz, estabilidad y seguridad, añadiendo que los dos países están llamados a invertir juntos en futuros proyectos, particularmente en África, como el gasoducto africano-atlántico Nigeria-Marruecos.

“Habida cuenta de su posición geográfica y de su notoriedad en la escena internacional, los dos Reinos tienen la responsabilidad de consolidar los vínculos entre los continentes africano y europeo y de servir de enlace entre el Sur y el Norte», prosiguió.

La organización conjunta de la Copa del Mundo de fútbol de 2030 por Marruecos, España y Portugal es un ejemplo edificante de cooperación Norte-Sur beneficiosa para ambos continentes, afirmó. 

Moratinos destacó asimismo que la visita de trabajo a Marruecos del Presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, abre un nuevo capítulo en las relaciones entre dos países socios, «amigos y vecinos, sólidamente unidos por la historia y la geografía».

Tras recordar la profundidad histórica de las relaciones bilaterales, Moratinos subrayó que la audiencia concedida por SM el Rey Mohammed VI al Presidente del Gobierno español tiene un «gran valor simbólico», en la medida en que da un «nuevo impulso» a la dinámica de cooperación global entre Rabat y Madrid.

La audiencia Real refleja también una voluntad compartida de establecer la relación hispano-marroquí como «modelo de referencia en un mundo convulso que busca redefinir la gobernanza internacional», concluyó.