El Sáhara marroquí, el vínculo perenne con África
El discurso pronunciado por SM el Rey Mohammed VI con motivo del 47º aniversario de la Marcha Verde, hizo un balance satisfactorio de los proyectos incluidos en el Programa de Desarrollo de las Provincias del Sur y destacó los méritos integracionistas del Gasoducto Nigeria/Marruecos.
Mientras la ejecución de estos proyectos avanza a pasos agigantados, con un índice de compromiso del 80% del presupuesto asignado, las provincias del sur están llamadas a desempeñar el papel, que siempre les ha correspondido, de enlace entre Marruecos y sus profundidades africanas, especialmente a través del proyecto de gasoducto Nigeria-Marruecos. En un momento en que los adversarios de Marruecos intensifican sus ataques a través de los medios de comunicación e invaden las redes sociales con rabiosas mentiras, el Reino prosigue, con calma y sobre el terreno, su marcha de desarrollo de su territorio y consolida sus relaciones con sus socios africanos. Las claras cifras presentadas en el Discurso Real no dejan lugar a dudas sobre la inquebrantable determinación de Marruecos de avanzar en esta marcha para garantizar una vida digna a los habitantes de estas provincias, tras haber ganado la batalla política y diplomática, gracias a los numerosos partidarios de la iniciativa de autonomía y de la marroquinidad del Sáhara en general. Así, SM el Rey se congratuló de «los resultados positivos alcanzados» en la puesta en marcha de todos los proyectos incluidos en el Programa de Desarrollo para el Sáhara marroquí, cuyo objetivo es promover la creación de empleo y las inversiones. El Soberano enumeró los proyectos estructurantes que contribuyen al cambio de la fisonomía de las provincias del sur y a su integración regional y continental: En primer lugar, la autopista Tiznit-Dajla, que está en su fase final de realización, la conexión definitiva de la región a la red eléctrica nacional, la extensión de las redes de comunicación y la finalización del proyecto de estaciones de energía solar y eólica. En cuanto al otro proyecto emblemático del programa, el puerto de Dajla Atlántica, el Soberano anunció que las obras de construcción se iniciarán próximamente tras la finalización de los estudios y los trámites administrativos. Otros proyectos son también un verdadero motivo de satisfacción por su innegable contribución a la creación de miles de puestos de trabajo, sobre todo el desarrollo y la transformación de los productos de la pesca y el acondicionamiento de más de seis mil hectáreas en Dajla y Buydur, que se han puesto a disposición de los jóvenes agricultores de la región. El Soberano también se congratuló de los progresos realizados en los sectores del fosfato, el agua y el saneamiento, e instó al sector privado a mantener su compromiso de promover proyectos sociales. Todos estos proyectos consolidan la vocación del Sáhara marroquí como vínculo inquebrantable entre Marruecos y su profundidad africana y como tierra llamada a desempeñar un papel de primer orden en el proyecto de gasoducto Nigeria-Marruecos, lanzado en 2016 por SM el Rey y el presidente nigeriano Muhammadu Buhari. A este respecto, el Soberano constata con satisfacción el avance de este gran proyecto, cuyos contornos han empezado a tomar forma tras el Memorando de Entendimiento, firmado recientemente en Rabat, con la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) y, en Nuakchot, con Mauritania y Senegal. Según el Soberano, la firma de este Memorándum es un hito esencial en el proceso de realización del proyecto y refleja el compromiso de los países interesados de contribuir a la realización de este proyecto estratégico e ilustra su voluntad política de garantizar su éxito. Para Marruecos, el gasoducto Nigeria-Marruecos, que atravesará varios países de la región antes de llegar al Sáhara marroquí, no es sólo una iniciativa bilateral Nigeria/Marruecos, sino que constituye «un proyecto estratégico al servicio de toda la región del África occidental, cuya población supera los 440 millones de habitantes», subrayó Su Majestad el Rey. Una vez terminado, deberá garantizar la seguridad energética de los quince países de la CEDEAO, y quedará para la posteridad como una obra en favor de la paz y la integración económica del continente africano, además de su misión de unir África y Europa. Saludando el apoyo prestado al proyecto por las instituciones financieras regionales e internacionales, SM el Rey reafirmó “el empeño de Marruecos de seguir obrando en estrecha cooperación con nuestros hermanos en Nigeria y con todos los socios, dentro de la total transparencia y responsabilidad, a fin de materializar este proyecto, lo más pronto posible”. Mientras los adversarios de Marruecos siguen aferrados a posiciones anticuadas y desesperanzadas, el Reino ha demostrado con hechos que la verdadera batalla es la del desarrollo, la prosperidad y el bienestar, no sólo de la población saharaui, sino de toda la vecindad africana. Con el inmutable apego de los marroquíes al Sáhara, con los sacrificios realizados para recuperar y defender las provincias del sur y, finalmente, con los proyectos presentes y futuros bajo el impulso de SM el Rey, este territorio, cuna de varias dinastías marroquíes, seguirá siendo para siempre el vínculo inalterable entre Marruecos y África.