La cuestión de los marroquíes expulsados de Argelia en 1975 en el centro de un encuentro en Rabat
La sensibilización de la Comunidad Internacional sobre la suerte de miles de marroquíes expulsados por la fuerza de Argelia en 1975 fue el tema central de un encuentro celebrado el lunes en Rabat.
Los participantes en este evento, organizado por la Organización Marroquí de Derechos Humanos (OMDH) y el Colectivo Internacional de Apoyo a las Familias de Origen Marroquí Expulsadas de Argelia en 1975 (CiMEA-75), exigieron a Argelia la reparación de los daños que ellos y sus familias sufrieron tras esta atroz expulsión. Se hizo hincapié en la tragedia vivida por 350.000 marroquíes que fueron deportados el día de Aid Al Adha, correspondiente al 27 de diciembre de 1975, dejando atrás a sus familiares, vecinos y posesiones, para encontrarse de la noche a la mañana en la frontera oriental del Reino. Celebrada en presencia de numerosas víctimas de esta expulsión arbitraria por parte de las autoridades argelinas, este encuentro fue la ocasión de hacer un llamamiento, en nombre de las víctimas, a los grupos parlamentarios. Además de la firma de un acuerdo de cooperación entre la OMDH y el CiMEA-75, el evento estuvo marcado por la firma de la versión árabe del libro «Un voyage sans retour» de Mohamed Cherfaoui. En este libro de 12 capítulos, el autor, que preside el CiMEA-75, recuerda su sufrimiento personal y el de miles de familias expulsadas de Argelia en aquella siniestra jornada, además de evocar acontecimientos y personajes significativos. En una declaración a la MAP, Cherfaoui se congratuló de la celebración de este «encuentro contra el olvido» para recoger documentos y pruebas que se presentarán ante la Corte Internacional de Justicia, culpando al régimen argelino del sufrimiento de cientos de miles de marroquíes de la época, tras esta deportación «inhumana». «El régimen argelino irrumpió brutalmente en las casas para expulsar a niños, ancianos y mujeres de sus hogares, algunos de los cuales estaban durmiendo», dijo, y afirmó que escribir sirve para revivir el recuerdo de este trágico suceso. Cherfaoui recordó el proceso de evacuación hacia las fronteras marroquíes de miles de mujeres, hombres, niños, ancianos e incluso personas con necesidades especiales. Argelia ha cometido «un doble crimen atroz: el primero es la expulsión forzosa, y el segundo es el olvido y la negligencia de estos hechos», deploró, llamando a que la Comunidad Internacional tome conciencia de este hecho histórico especialmente grave.