Sáhara : cómo los servicios argelinos reclutaron a un espía dentro de la Minurso
Argelia no se desespera de seguir utilizando los raros «separatistas del interior» adquiridos al Polisario, incluso si eso significa reclutar entre el personal de la Minurso, como hicieron los servicios secretos argelinos con Angélica, una funcionaria de la misión onuvense con deber de neutralidad impuesto por su función.
Fue en Sudáfrica dónde salió a la luz el caso. Y fue el exmarido de Angélica, un indio afincado en Sudáfrica, quién dió a conocer los detalles de este complot orquestado bajo las órdenes directas del general Said Chengriha, jefe de Estado Mayor del Ejército y hombre fuerte de momento en Argelia.
La funcionaria de la Minurso ha formado una célula de espionaje que coordina el Polisario, en los campamentos de Tinduf, y los separatistas del interior que viven en el Sáhara, en particular en El Aaiún.
Angélica es ayudada por su hermana y, sobre todo, por el marido de esta última, un mauritano propietario de una posada en la región de Marrakech, además de un ex funcionario de la Minurso que Marruecos había obtenido, en el pasado, la exclusión y reconducción a las fronteras.
Agente del servicio secreto argelino, el ciudadano mauritano vive con su esposa (la hermana de Angélica) en Lalla Takerkoust. La pareja de espías había vivido durante dos años en El Aaiún, antes de establecerse cerca de Marrakech. Aquí es dónde recibe a los separatistas del interior.
Además de la información intercambiada entre el Polisario y los separatistas del interior, la célula se encarga de entregar el dinero proporcionado por la inteligencia argelina a estos últimos y de transmitir la información a los generales.