Sáhara marroquí: El secretario general de la ONU reafirma la centralidad del proceso político de la ONU

El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, ha reafirmado la centralidad del proceso político de la ONU en la cuestión del Sahara marroquí.

En respuesta a una pregunta sobre la reciente visita del enviado personal para el Sáhara marroquí, Staffan de Mistura, a la región, durante su rueda de prensa de inicio de año con los medios de comunicación acreditados por la ONU, Guterres respondió que «de Mistura ha realizado su primera visita a la región. Confío en que el proceso político se reanude de nuevo.

Guterres añadió que «mi mensaje a las partes es que un problema que lleva tantas décadas en una región del mundo en la que asistimos a gravísimos problemas de seguridad, en la que vemos cómo se multiplica el terrorismo en el Sahel y cada vez más cerca de las costas, está en el interés de todos resolver de una vez por todas este problema del Sáhara», insistiendo en que «es hora de que las partes entiendan la necesidad de dialogar en busca de una solución, y no sólo de mantener un proceso interminable».

Esta afirmación es lo contrario de lo que informó la AFP sobre las partes implicadas en este diferendo regional. Además, se produce tras la visita regional del enviado personal del secretario general de la ONU a Marruecos, Argelia y Mauritania. Constituye un duro revés para las posiciones de Argelia y su títere el «polisario», y desmonta sus invenciones y mentiras sobre la realidad de la situación en el Sáhara marroquí, y esto en más de un aspecto.

El secretario general de la ONU reafirma la centralidad del proceso exclusivamente político de la ONU, facilitado por su enviado personal, Staffan de Mistura, cuyo mandato y función se confirman en la Resolución 2602 del Consejo de Seguridad, adoptada el 29 de octubre de 2021.

Esta resolución consagra el proceso de la mesa redonda, con la participación de Marruecos, Argelia, Mauritania y el «polisario», como único marco para alcanzar una solución política realista, pragmática, duradera, mutuamente aceptable y de compromiso para esta cuestión. Esta resolución también reafirma la preeminencia de la Iniciativa de Autonomía Marroquí como la única solución seria y creíble a este diferendo regional, que ha sido fabricado y mantenido por Argelia contra la integridad territorial de su vecino, Marruecos.

Insistiendo en el diálogo entre todas las partes, en el marco del proceso político de la ONU y, por tanto, de las mesas redondas, el secretario general de la ONU recuerda a Argelia sus responsabilidades y la sitúa ante sus obligaciones.

Cabe recordar que Argelia había rechazado la resolución 2602 en cuanto fue adoptada y declaró que no participaría más en el proceso político. Sin embargo, ante la presión internacional y el temor a ser condenado por el Consejo de Seguridad, Argel recibió finalmente al enviado personal, de Mistura, durante su reciente visita regional, tras varias semanas de vanas dilaciones y tácticas dilatorias.

Además, al igual que en Rabat, donde se reunió con Nasser Bourita, ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y Marroquíes Residentes en el Extranjero, de Mistura fue recibido en Argel por el ministro de Asuntos Exteriores argelino, Ramtane Laamamra, confirmando, si fuera necesario, el papel y el estatus de Argelia como parte principal de este diferendo.

Al reafirmar el marco exclusivamente onusiano del proceso político, el secretario general de la ONU no dejó espacio a ningún otro actor, ni a la Unión Africana, ni a la Liga Árabe, ni a la Unión Europea, a la que el Consejo de Seguridad no concede ningún papel en la cuestión del Sáhara marroquí. Con ello, Guterres ha rechazado los intentos solapados de Argelia y su títere «polisario» de involucrar a los actores regionales en la cuestión del Sahara marroquí.

El SG de la ONU descartó las mentiras difundidas por el régimen argelino y su grupo de mercenarios armados sobre una supuesta guerra en el Sáhara marroquí.

En ningún momento Guterres se refirió a una supuesta escalada militar en las provincias del sur del Reino. Sin embargo, en su declaración, Guterres volvió a referirse extensamente a las amenazas terroristas a las que se enfrentan las regiones del Norte de África y del Sahel. Cabe recordar que los informes internacionales han confirmado los vínculos probados del grupo separatista armado «polisario» con los grupos terroristas del Sahel.