La decisión de España de acoger en secreto al denominado Brahim Ghali podría perjudicar las «buenas» relaciones entre Rabat y Madrid – Experto peruano –

La decisión de España de acoger en secreto al jefe de los separatista Brahim Ghali podría perjudicar las «buenas relaciones de amistad y cooperación» entre Rabat y Madrid, afirmó el experto peruano en relaciones internacionales, Ricardo Sánchez Serra, señalando que el régimen militar argelino intenta constantemente crear «perturbaciones» en las relaciones marroquíes-españolas.
En un artículo publicado por el diario peruano La Razón, Sánchez Serra subrayó que la «acogida secreta» por parte de España del llamado Brahim Ghali refleja un «desprecio» a las leyes españolas y al derecho internacional, pero también «un verdadero acto de hostilidad contra Marruecos». En esta línea, el experto peruano insiste en que el jefe separatista es «uno de los criminales más peligrosos del polisario y está acusado de genocidio, crímenes contra la humanidad, asesinato, violación y secuestro, entre otros». Bajo el pretexto de pretendidas «razones humanitarias», España permitió la entrada en su territorio «a un criminal con una identidad, un pasaporte y un nombre falsos para evitar su detención y su comparecencia ante la justicia española», añadió el experto. Para él, «España ha caído en la trampa de Argelia provocando un incidente embarazoso para Madrid», precisando que el régimen argelino buscó «crear problemas en las seculares relaciones marroquíes-españolas». Sánchez Serra, que ya visitó los campamentos de Tinduf, subrayó que «todo el mundo sabe que Argelia ha creado, financia, acoge, arma y apoya diplomática y mediáticamente al polisario. Asimismo, Argelia proporciona a los dirigentes del grupo separatista aviones privados y pasaportes falsos”. «Lo que es asombroso es que un país como España se deje engañar tan fácilmente y permita que un criminal entre en su territorio», recalcó, recordando que Marruecos rechazó, en el marco del respeto de la integridad territorial de los países y de las relaciones de buena vecindad con España, una petición para recibir y mantener reuniones con el ex presidente de la región de Cataluña, Carles Puigdemont, sin el consentimiento de las autoridades españolas. El experto peruano añadió que este «nuevo episodio y acto inamistoso» del gobierno español hacia su verdadero aliado en la región norteafricana que es Marruecos, podría costar mucho si no se corrige, especialmente en términos de «cooperación judicial y de seguridad y en los ámbitos de la lucha contra el terrorismo, la inmigración ilegal y el narcotráfico».