La razón y el pragmatismo exigen el pleno reconocimiento por parte de la UE de la soberanía de Marruecos sobre el Sáhara (experto italiano)

La razón y el pragmatismo exigen el pleno reconocimiento por parte de la UE de la soberanía de Marruecos sobre el Sáhara, escribe, hoy lunes, el experto italiano en relaciones internacionales, Marco Baratto, que destaca la condición de Marruecos de «socio fiable y estable que comparte los valores de Europa» en materia de promoción de los Derechos Humanos, lucha contra el terrorismo, desarrollo sostenible y respeto mutuo.
«Europa debe ser pragmática y abrir su propia oficina de representación en las provincias del sur del Reino», subraya el experto italiano en un artículo publicado por el diario electrónico «Mediterranews», destacando los activos y la fuerte dinámica de desarrollo que experimenta el Sáhara marroquí, así como su posición estratégica como puerta de entrada al África subsahariana. «Europa no puede ser una mera espectadora del potencial de estas regiones, de su desarrollo tecnológico y de su papel como puerta de entrada al continente del futuro que es África», alegó, señalando que Marruecos es estratégico para la seguridad en Europa, «como lo demuestra la ayuda prestada a las fuerzas policiales francesas para identificar y desmantelar una peligrosa célula terrorista que podría haber cometido una matanza en Semana Santa». La transición ecológica es también uno de los sectores en los que Europa y Marruecos pueden trabajar, continuó. «Basta con pensar en las centrales solares que ya están activas y en las muchas otras que podrían ser útiles tanto para Marruecos como para Europa y que podrían a medio y largo plazo liberar al Viejo Continente de los combustibles fósiles y llevarlo al fin de la dependencia económica europea de naciones en las que los derechos humanos no están ciertamente en el programa», señaló. A este respecto, cabe señalar, dijo, que Marruecos es un Estado de Derecho, en el sentido aceptado por la comunidad internacional, y que esto también debe tenerse en cuenta a la hora de intensificar las relaciones. De hecho, cada vez más a menudo, las economías de los Estados se evalúan no sólo en función de los recursos que tienen en su subsuelo, sino también en función de las implicaciones éticas, morales o económicas, señaló. «El balance ético de una nación no es, pues, sólo una cuestión de conciencia, sino también de orden económico. Y en este balance, Marruecos puede considerarse ciertamente fiable y seguro», afirmó Baratto. En este sentido, señaló las violaciones de los Derechos Humanos en algunos países vecinos del Reino, «donde desgraciadamente todavía hay zonas grises en cuanto a la represión de la disidencia y la libertad de expresión del pensamiento». “No podemos, como europeos, seguir aceptando y siendo dependientes de naciones donde se violan los Derechos Humanos. Como europeos, no podemos estar atados a naciones que consideran a los pueblos o a ciertas naciones europeas como enemigos tradicionales y eternos», alegó. «Necesitamos un acto de valentía y reconocer a Marruecos como un aliado estable y fiel a los valores que profesa Europa. Por lo tanto, Europa necesita a Marruecos, así que tenemos que actuar, seguir el pragmatismo y el coraje estadounidenses y reconocer la plena y legítima soberanía de Marruecos sobre sus provincias del sur», subrayó.