El presidente de la Cámara de Consejeros se entrevista con una delegación parlamentaria peruana
El presidente de la Cámara de Consejeros, Enaam Mayara, se entrevistó el lunes en Rabat con una importante delegación parlamentaria peruana, encabezada por el presidente del grupo de apoyo y respaldo a la iniciativa de autonomía marroquí en el Congreso peruano, Carlos Ernesto Bustamante Donayre, con el objetivo de examinar las vías para impulsar las relaciones bilaterales.
Un comunicado de la segunda cámara recibido por la MAP indica que Mayara aprovechó esta ocasión para subrayar la importancia particular de las relaciones entre Marruecos y Perú, lamentando, sin embargo, el hecho de que los dos países no puedan aún promover sus relaciones al mismo nivel de importancia en los ámbitos económico y social, así como en las áreas prioritarias de cooperación. Explicó que ello se debe a «la situación política interna del Perú», expresando su esperanza de que «las circunstancias actuales sean temporales y no tengan impacto en la durabilidad de las relaciones bilaterales».
En este sentido, señaló que la postura de Perú sobre la cuestión del Sáhara marroquí, principal punto de discordia entre los dos países, no aporta ningún apoyo efectivo para una solución definitiva y justa al conflicto artificial sobre la marroquidad de las Provincias del Sur, ni ofrece las condiciones para apoyar el proceso político bajo los auspicios de Naciones Unidas.
Tras informar a la delegación peruana de las condiciones inhumanas impuestas a las personas secuestradas en los campamentos de Tinduf por separatistas que trabajan para la agenda de otro país, Mayara subrayó que el país afectado por esta cuestión debe ahora dar mayor prioridad al aspecto humano sobre el político, adoptando al mismo tiempo una posición neutral capaz de aportar un apoyo real a los esfuerzos por encontrar una solución realista, duradera y aceptada por todos.
En este sentido, se congratuló de la iniciativa del Congreso peruano de crear un grupo de apoyo a la iniciativa marroquí de autonomía.
También expresó su convicción de que la iniciativa de autonomía ampliada presentada por Marruecos representa una solución pragmática, ideal y duradera para consolidar la paz y alcanzar el desarrollo en la región, habida cuenta del apoyo internacional a esta iniciativa, considerada por la comunidad internacional como seria y creíble, además del hecho de que emana de la voluntad del pueblo saharaui y se inscribe en un consenso nacional en torno a las constantes constitucionales de la monarquía, el Islam, la opción democrática y la integridad territorial del Reino.
Por su parte, los miembros de la delegación parlamentaria peruana indicaron que su visita de trabajo a Marruecos se enmarca en la iniciativa del Congreso peruano de crear un grupo de apoyo a la iniciativa marroquí de autonomía, lo que refleja «su convicción de que la propuesta de autonomía sigue siendo la única solución realista al conflicto artificial en torno al Sáhara marroquí».
También señalaron que esta visita forma parte de un cambio general en Perú, que rompe con una situación política que había conducido anteriormente a la adopción de una posición política contraria a la excelencia de las relaciones históricas Marruecos-Perú, indicando que su objetivo es elaborar un informe detallado sobre la situación real en las provincias del sur, que será enviado a los nuevos responsables del país, con el fin de tomar las medidas necesarias para volver a situar las relaciones bilaterales al mismo nivel que antes, en particular la revisión de la posición peruana sobre la cuestión del Sáhara, tomada durante el mandato del antiguo presidente.
La delegación peruana expresó asimismo su deseo de poder crear las condiciones propicias para la celebración, el año próximo, del cincuentenario de las relaciones bilaterales, a la altura de la excelencia de las relaciones fraternales entre ambos países y de sus lazos históricos de amistad.
Asimismo, los miembros de la delegación señalaron la importancia de la creación en el seno del Congreso peruano de un grupo de apoyo y respaldo a la iniciativa marroquí de autonomía y su papel en la promoción de las relaciones bilaterales en todos los ámbitos, habida cuenta de la posición de liderazgo del Reino a nivel regional e internacional, así como de su estabilidad y de la paz que reina en él, en apoyo de un consenso nacional en torno a la monarquía y la integridad territorial.