Sáhara: El presidente colombiano actuó como un «guerrillero» ignorando los intereses de su país con Marruecos – diario colombiano –

Al reconocer la entidad títere de la «rasd», el presidente colombiano, Gustavo Petro, ha actuado como un «guerrillero», ignorando los intereses de Colombia con un país amigo como Marruecos, escribe el diario colombiano La Patria.

Bajo el título «Marruecos-Colombia, una amistad masacrada», el periodista Andrés Hurtado recuerda que Petro tomó posesión el 7 de agosto y tres días después, a través del Ministerio de Asuntos Exteriores, decidió «reconocer al Frente Polisario, dándole ‘estatus’ de país soberano. Parece que tenía urgencia de hacerlo».

«En otras palabras, Petro procedió como si fuera todavía guerrillero olvidándose que es la cabeza y el representante de un país soberano que es Colombia, país que ha sufrido durante muchos años los horrores y las aberraciones de la guerrilla asesina», lamentó.

Para él, «a nadie en este país, ni a Petro por supuesto, le gustaría que otro país se aliara con Nicaragua para atentar contra nuestra soberanía y territorialidad. Pues bien, eso ha hecho Petro con Marruecos».

«El Polisario atenta contra la soberanía y la territorialidad de Marruecos, nuestro gran país aliado en África», continuó Hurtado, quien señaló que «ante esta aberración de Petro el Senado en pleno en sesión del 19 de octubre del año pasado aprobó por mayoría una constancia contra el gobierno por la barbaridad cometida contra “un gran país amigo y aliado” (palabras del Congreso)». De los 108 senadores, 63 firmaron la resolución en cuestión y son representantes de los nueve partidos que apoyan al Gobierno, a saber: Partido Liberal, Partido Conservador, Partido de la U, Alianza Verde, Cambio Radical, Mira, Colombia Justa Libre, Centro Democrático y la Liga de Líderes Anticorrupción.

«Cuando Roy Barreras vio que eran muchos los senadores que querían criticar al gobierno por su errada y malintencionada actitud decidió no conceder más el uso de la palabra» a los senadores que se levantaron contra el ataque a la integridad territorial de Marruecos, recordó.

En este contexto, el artículo recuerda el contenido de la resolución adoptada a finales de octubre, en la que el Senado colombiano expresó su «categórico rechazo» y «total desacuerdo» con la decisión del ex guerrillero Petro de restablecer relaciones diplomáticas con el ente títere de la «rasd», que «va en contra de los principios fundamentales de la diplomacia colombiana».

Hurtado lamenta la decisión de Petro, que se produce en un momento en el que «en los últimos años, las relaciones entre Colombia y Marruecos han alcanzado un nivel óptimo y jamás visto… A nivel bilateral, el alto nivel de las relaciones entre nuestros dos países se ha traducido en hechos concretos y sumamente beneficiosos para nuestras dos naciones. Se han fortalecido los lazos políticos, económicos, sociales, turísticos académicos y humanos gracias a los acuerdos y convenios firmados entre Bogotá y Rabat».

«Debemos agradecer que Marruecos es el único, repito, el único país africano que no exige visa a los colombianos para entrar a su territorio. Marruecos fue el único país invitado a la feria nacional de artesanías de Colombia y tal como lo dicen los senadores es un país clave para la agricultura de Colombia», ya que es uno de los mayores productores de fosfatos del mundo.

El autor del artículo recuerda que «este país africano, como afirmaron los senadores, representa un socio estratégico y privilegiado de Colombia en África y en el mundo árabe, dado su liderazgo y el reconocimiento del que goza a nivel regional, continental y mundial».

«Petro, lo sabemos, se mete y de mala manera en los asuntos internos de los países que no comparten su ideología. Por lo demás, es justo recordar que el Senado representa a los colombianos y que dos cancilleres nuestros han visitado a Marruecos como primer y único destino en África. Petro con un plumazo borró a un gran amigo, con el cual llevamos casi medio siglo de relaciones», concluye Hurtado en este artículo publicado por La Patria.