El embajador de Marruecos en Palestina se entrevista con el ministro palestino sobre las últimas evoluciones

El embajador de Marruecos en Palestina, Abderrahim Meziane, se reunió, este jueves en Ramallah, con el ministro palestino de Asuntos de Al-Quds, Fadi Al-Hadmi, sobre las últimas evoluciones en la Ciudad Santa y sus alrededores.

Durante este encuentro, Meziane afirmó que «el Reino de Marruecos está preocupado por los preocupantes acontecimientos que tienen lugar en la ciudad de Al-Quds y sus alrededores», subrayando «el interés continuo que Su Majestad el Rey Mohammed VI, Presidente del Comité de Al-Quds, concede a la causa palestina y a la Ciudad Santa».

Señaló también que esta reunión se inscribe en el marco del seguimiento por parte de Marruecos, bajo la dirección de Su Majestad el Rey, de la situación de Al-Quds Acharif y del rechazo por el Soberano de las prácticas destinadas a modificar el estatuto histórico y jurídico de la ciudad santa.

Por su parte, Al-Hadmi subrayó que «la gravedad de la situación en la ciudad exige que todos los países activos intervengan rápidamente para detener la escalada de la agresión israelí».

Añadió que «hay una escalada israelí muy peligrosa que afecta a todos los aspectos de la vida en la ciudad de Al-Quds, en el período previo a las elecciones israelíes y que se encubren bajo las fiestas judías».

«Lo que más de 130.000 palestinos del campamento de ‘Shu’fat’ y de los barrios de ‘Ras Khamis’, ‘Ras Shehadeh’, ‘Dahiyat al-Salam’ y ‘Anata’ han sufrido desde el pasado fin de semana es un castigo colectivo que equivale a un crimen de guerra», dijo el ministro palestino.

«Esto coincide con el aumento de las demoliciones de casas en toda la ciudad, las actividades de asentamiento de colonos, las detenciones y deportaciones, los intentos de cambiar el estatus histórico de la mezquita de Al-Aqsa mediante incursiones, la realización de rituales talmúdicos y las provocaciones, además de las excavaciones en el muro de Al-Buraq y los palacios omeyas», continuó Al-Hadmi.

Llamó a todos los Estados y actores que actúen de inmediato y con firmeza para poner fin a estos ataques y violaciones, trabajando al mismo tiempo seriamente para garantizar la protección del pueblo palestino como primer paso hacia el establecimiento de un Estado palestino independiente con Al Quds Oriental como capital.

Además, Al-Hadmi expresó su disposición a reforzar la cooperación y la coordinación con la Agencia Bayt Mal Al-Quds Sharif, que trabaja para proteger la ciudad santa, defender su estatus histórico y legal y apoyar la resistencia de los maqdisíes contra los proyectos israelíes de judaización.